El jamón “serie oro”, es un producto de máxima calidad. Cada jamón se selecciona cuidadosamente y se cura durante un mínimo de 24 meses en condiciones óptimas, garantizando que el sabor y la textura sean excepcionales. Además, se trata de un jamón con certificación de origen, lo que garantiza su procedencia y calidad.
Uno de los aspectos más destacados del jamón “serie oro” es su sabor. Este jamón tiene un sabor intenso y equilibrado, con un toque dulce y salado que lo hace irresistible. Además, su textura es suave y jugosa, con un aroma que evoca los campos de la dehesa.
Otro factor importante a destacar es que se trata de un producto saludable y nutritivo. El jamón ibérico es rico en proteínas y ácidos grasos monoinsaturados, que contribuyen a mantener una dieta equilibrada y saludable.
Forma de presentación: El producto se presenta en piezas enteras, deshuesadas al vacío o en formato loncheado. El embalaje se realiza en cajas que pueden contener 1 o 2 piezas enteras.
Condiciones de almacenamiento: Los productos deben almacenarse en lugares frescos y secos, protegidos de la luz directa. En el caso de los productos loncheados, es necesario conservarlos en refrigeración a temperaturas inferiores a 10 °C.
Condiciones de transporte: Las piezas enteras deben transportarse en vehículos isotermados. Los productos loncheados requieren transporte en condiciones de refrigeración.
Forma de consumo: El producto puede consumirse en lonchas, idealmente como aperitivo o en bocadillos.
Loteado y durabilidad: Cada lote de fabricación se identifica con la letra "E" seguida de un número correlativo, comenzando por 1 para cada nuevo lote. Las piezas deshuesadas o loncheadas al vacío llevan un lote que empieza con la letra "D", seguido también de un número correlativo. Cada pieza cuenta con un número único dentro de su lote para su correcta identificación.
Vida útil: A cada lote se le asigna una fecha de consumo preferente. En el caso de productos enteros, esta fecha es de hasta 5 años desde el inicio de su elaboración. Para los productos loncheados o deshuesados, la vida útil es de 1 año desde el envasado.
Modo de empleo: Para los productos enteros, se recomienda retirar una capa exterior de entre 1 y 2 milímetros antes de su consumo, eliminando posibles restos de polvo, moho o grasa. Luego, el producto puede cortarse en lonchas o en pequeños trozos. Es importante conservarlo siempre en un lugar fresco y bien ventilado.